22 marzo 2005

La lluvia en Sevilla es una maravilla

A todo aquel que esté pensando en venir a Sevilla en Semana Santa, que se le quite la idea de la cabeza. Esto es un infierno, y cada año va a mas. Esta semana me pone de los nervios, porque tu vida se ve paralizada al no poder hacer nada de lo que haces habitualmente.

  • El coche lo tengo aparcado desde el viernes y no lo puedo mover, a no ser que despues quiera aparcar a 3 kilometros de casa (me pasó el año pasado).

  • Hay calles por las que la policía no te deja pasar (totalmente cierto), no vaya a ser que ocupes la silla de alguien que ha pagado muchos euros por sentarse en primera fila a ver un paso.

  • Por supuesto, los comercios del centro cierran así que tienes que hacerlo todo por la mañana.

  • La ciudad se llena de ese olor horrible a incienso.

  • La gente va vestida de Aznar, y los niños, de aznarines en potencia que dan miedo solo verles.

  • Por supuesto no puedes comentar nada en contra de la semana santa porque te miran como si fueras un hereje


Me pregunto qué pensarían la mayoría de los católicos integristas sevillanos si esta manifestación religiosa la hiciera el pueblo musulmán, y si se les permitiría todo lo que esta semana se permite en nombre de la religión.

Por supuesto estoy deseando que lluevan chuzos de punta y que no pueda salir ningún paso, y ver a toda esa gente llorando en televisión, dando vergüenza a España entera, tristes por no poder ponerse un capirote, andar 8 horas y pagar del orden de 150 euros por hacerlo.

Mi forma de protestar es vestirme con mi peto vaquero y mezclarme entre los barroquitos sevillanos que huelen a Herbal Essence, y soportar sus miradas que en otras ocasiones me harían sentir un apestado, pero ahora me enorgullecen por no formar parte de la mayoría.

Y dentro de dos semanas... la feria.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo he vivido un año en sevilla, por motivos de trabajo. Tengo que reconocer que llegué con muchísimos prejuicios sobre la imagen que se tiene desde fuera de la ciudad, que tristemente se confima en muchísimos casos. Me refiero a que es una ciudad conservadora, cerrada, el tópico de la falsedad de muchos sevillanos, fanática religiosa...
A pesar de todos esto, descubrí que hay distintas sevillas donde cada uno tiene su lugar. Y a pesar de la incomodidad de la semana santa, (el domingo de ramos me quedé literalmente ATRAPADA en triana, no había manera humana de llegar andando a mi casa en el centro), me gustó la semana santa. No soy religiosa, pero me pareció de gran belleza (fanáticos aparte). Reconozco que esto es una visión parcial y de alguien que no lo sufre año tras año... pero bueno, sólo quería comentarlo.

Mambotaxi dijo...

Por supuesto, aqui convive gente de todas clases, y odio que la imagen que se tenga de Sevilla sea precisamente la de esta semana, porque no es la de la gente que me rodea. Es como si durante todo el año estuvieran representando un papel, y durante esta semana sacan su verdadera personalidad. No me gusta generalizar, y como ya he dicho, lo que más me jode de esta semana es que no se puede hacer vida normal. El resto, alla cada uno con su vida, su fe y su forma de vestir.

Anónimo dijo...

Te compadezco. Aqui en Barcelona tenemos las fiestas de la Merçè, que no se pueden comparar con las vuestras de Semana Santa, pero durante algunos días crean el mismo sentimiento de agobio a los que vivimos aquí y observamos cómo el turismo llega, arrasa con todo, y se va.